En Plaza Constitución
Se realizó el acto por el “Día del Periodista”
Ayer, en Plaza Constitución, se llevó a cabo el acto por “Día del Periodista”, que organizó la Municipalidad. La señora Zélika Alarcón de Tamaño fue la encargada de brindar un discurso conmemorativo por la fecha. Luego, las periodistas Constanza Fernández Larraburu, Luisina Viviani y Natalia Frías junto a la intendenta municipal, Verónica Berisso, colocaron una ofrenda floral a los pies del monumento a Mariano Moreno.
Estuvieron presentes funcionarios del Ejecutivo Municipal, entre ellos, la mencionada jefa comunal; la secretaria de Desarrollo Humano, Dora Bogdan; el secretario de Turismo, Ricardo Lupi, entre otros. También participaron integrantes del Concejo Deliberante; el senador provincial, Francisco Morchio; la diputada nacional, Marcel Ántola, junto a periodistas del ámbito local.
PALABRAS ALUSIVAS:
En principio, Zélika Alarcón, manifestó: “Agradezco profundamente la invitación para dirigirles la palabra en este día pues siempre esta fecha ha tenido para mí una connotación muy especial ya que he pertenecido a una familia de periodistas de la que me siento auténticamente orgullosa. He sido testigo desde el seno de mi hogar paterno de una época muy difícil para el periodismo argentino. No me lo contaron, simplemente lo viví y lo sufrí”.
“Mi padre, Humberto Alarcón Muñiz, llegó a Gualeguay en 1930. Fue fundador y director del diario Voz Radical , Jefe de redacción de El Debate ( 1935 a 1938), fundador de la revista Litoral, co-fundador del periódico Sembrando, órgano oficial de la Sociedad Rural Gualeguay (1942) , co-fundador y primer director del diario Pregón en 1945 junto a Francisca Arrighi de Garibotti , Héctor Garibotti y Juan Sastre y llevó adelante muchas otras actividades relativas al periodismo como las realizadas en la inolvidable Difusora Popular y su antecedente Propaladora Sarmiento .
Creo que huelgan las palabras para hablar de la actividad periodística de mi hermano, Mario pues, todos los presentes recordarán su paso por distintos órganos periodísticos de Entre Ríos, del país y de Gualeguay en su lucha por la verdad, la justicia, la libertad, en la imperiosa necesidad de defender los derechos esenciales del hombre y el ciudadano. Había tenido un gran maestro, nuestro padre. De él se nutrió y abrevó: su dignidad, su sacrificio y su convencimiento y entereza para volcar a través del micrófono o del papel la palabra justa que transmitiera su pensamiento, el espíritu de la verdad. Esa fue su misión, en un claro y auténtico derrotero en defensa de los valores esenciales de la democracia”.
“No puedo olvidar de mencionar a mi hermano Luis Alarcón, “Beto”, que incursionó en el periodismo deportivo, su entusiasmo por la concreción de un sueño, el autódromo. No puedo olvidar a mi hermano Jorge ejerciendo periodismo radial en su diaria tarea en LT38, expresando su férrea convicción democrática, su condena hacia quienes no valoran en su real dimensión las oportunidades que la democracia nos brinda a los ciudadanos para recuperar al gran país que alguna vez fuimos. No puedo olvidar su enérgica defensa de la República que muchas veces molestó a tantos. La República, esta enorme palabra que significó para mis hermanos el verdadero sentido de la vida”.
La oradora también manifestó: “Quiero aprovechar la ocasión que me brindan los organizadores de este acto para rescatar del olvido a una mujer que sacrificó su vida en aras del periodismo, una mujer que conservó su temple y su dignidad defendiendo desde este humilde rincón gualeyo la verdad, la justicia, la libertad, la democracia. Recuerdo a doña Francisca Arrighi de Garibotti escritora, poeta y periodista quien, como mencionara anteriormente, fundara junto a mi padre en 1945 el diario Pregón, el que se convirtió en un órgano esencial en defensa de las leyes fundamentales, en aquellos aciagos días de persecución a la libertad de prensa. Ella emitió su voz, demostró su coraje sin claudicaciones haciendo frente al momento dramático que atravesaba el país ante la falta de garantías, en opresiva dominación para someter la dignidad de los hombres y mujeres en evidente avasallamiento a los derechos constitucionales”.
“Gracias, mil gracias por darme la oportunidad de recordar a mi padre, a mis queridos hermanos y rescatar del olvido el nombre de una mujer admirable que tuve el privilegio de conocer, doña Francisca Arrighi de Garibotti”, expresó por último Zélika Alarcón.