La licitación se realiza bajo el régimen de concesión de obra pública por peaje e incluye la modernización, ampliación, operación y mantenimiento del sistema de señalización, además de las tareas de dragado, redragado y mantenimiento del corredor fluvial. El tramo abarca desde el kilómetro 1238 del río Paraná, en la zona de Confluencia, hasta la Zona de Aguas Profundas Naturales del Río de la Plata exterior, a la altura del kilómetro 239,1 del canal Punta Indio.

El plazo de la concesión será de 25 años y la fecha límite para la presentación de ofertas está fijada para el viernes 27 de febrero de 2026 a las 13. Los pliegos ya se encuentran disponibles para su descarga en la plataforma oficial contrat.ar.

Según lo establecido, el concesionario deberá realizar una inversión de 425 millones de dólares durante los primeros seis años. El esquema tarifario prevé bandas con un recupero estimado del 12% para la tarifa máxima y del 6% para la mínima. Desde la Anpyn indicaron que las tarifas de peaje fueron reducidas tras los pedidos del sector empresario, con rebajas de más de 20 centavos por etapa. En ese sentido, el titular de Ciara-CEC, Gustavo Idígoras, señaló que el tramo Timbúes–océano bajó de 4,30 a 3,80 dólares.

La Hidrovía argentina concentra más del 80% de las exportaciones agroindustriales del país y resulta estratégica también para el comercio de Paraguay, el sur de Brasil, Uruguay y Bolivia. Desde el Gobierno remarcaron la necesidad de aumentar el calado para permitir que los buques naveguen con carga completa, reduciendo costos logísticos y mejorando la competitividad.

El proceso licitatorio fue elaborado a partir de mesas de diálogo interjurisdiccionales, una audiencia pública ambiental y un procedimiento de observaciones previas, con participación de provincias, usuarios y actores del sector privado. Además, tras la fallida licitación del año pasado, el Gobierno contó con respaldo técnico de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad), que estimó que al menos ocho grandes empresas globales están en condiciones de competir.

El pliego mantiene la restricción para la empresa dragadora china CCCC, al establecer que no podrán participar firmas controladas directa o indirectamente por Estados soberanos o agencias estatales.

Entre los principales cambios consensuados con cámaras empresarias se destacan la reducción de la tarifa mínima, la readecuación del plan económico financiero, la obligación de profundización a 42/44 pies, una mayor ponderación del balizamiento en la evaluación y modificaciones técnicas en el diseño de buques y documentación de batimetrías.

Desde el Ejecutivo sostienen que esta licitación permitirá destrabar obras largamente postergadas y convertir a la principal vía de comercio exterior del país en una herramienta central para el desarrollo económico de la Argentina y la región.

Fuente: La Nación