Kueider y Guinsel fueron arrestados al intentar ingresar al país vecino con el dinero no declarado. Desde entonces permanecen detenidos a la espera de una definición de la Corte Suprema de Paraguay, encargada de resolver si serán extraditados a la Argentina.

El pedido de extradición fue impulsado por la jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, en el marco de una investigación por enriquecimiento ilícito y presunto lavado de dinero. La Fiscalía paraguaya ya se manifestó a favor de la extradición, aunque aclaró que el traslado solo podría concretarse una vez que Kueider sea juzgado por el delito de contrabando en ese país.

El exsenador rechazó el mecanismo de trámite simplificado, lo que derivó en la apertura del juicio formal. Durante el proceso, su defensa presentó múltiples incidentes con el objetivo de dilatar los tiempos, aunque sin cuestionar la validez del pedido de extradición.

La situación del exlegislador entrerriano continúa siendo seguida de cerca en la provincia y en Gualeguay, donde el caso generó amplio interés por su relevancia política y judicial.