Renuncia
Manuel García-Mansilla presentó su renuncia indeclinable como juez de la Corte Suprema de Justicia
El juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación Manuel García-Mansilla presentó su renuncia indeclinable como , tras permanecer 40 días en el cargo. Su decisión se produjo luego de que el Senado rechazara su pliego por 51 votos en contra y 20 a favor. En su carta de renuncia, dirigida al presidente Javier Milei, García-Mansilla expresó que la falta de integración completa del tribunal afecta negativamente la vida de los ciudadanos.
En su carta de renuncia, dirigida al presidente Javier Milei, García-Mansilla expresó que aceptó el nombramiento "con la convicción de que la falta de integración de la Corte Suprema era un grave problema institucional que requería una solución urgente". Además, justificó su aceptación del cargo por decreto, a pesar de haber manifestado anteriormente su oposición a este mecanismo, argumentando que existen antecedentes en la historia constitucional que respaldan dicha práctica.
La renuncia de García-Mansilla deja nuevamente a la Corte Suprema con solo tres miembros: Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti. Esta situación representa un desafío para el Gobierno, que buscaba consolidar su influencia en el máximo tribunal.
Cabe destacar que, previo a su renuncia, García-Mansilla enfrentaba una medida cautelar dictada por el juez federal Alejo Ramos Padilla, que le ordenaba abstenerse de firmar fallos y decisiones administrativas. Esta medida, sumada al rechazo de su pliego en el Senado, influyó en su decisión de dimitir.