“Todos los días un poquito, no en todos los lados iguales”, explicó el directivo al referirse a la forma en que se reflejará la baja en los surtidores. Según indicó, la decisión responde al análisis permanente de variables como la oferta, la demanda y las condiciones del mercado.

Marín señaló que desde el inicio de su gestión, a fines de 2023, la empresa busca sostener un “acuerdo de honestidad con los consumidores”, en el cual los precios acompañen la dinámica real del mercado, tanto en subas como en bajas. En relación al gasoil, aclaró que la situación es más compleja y que se aplicarán ajustes diferenciados según el tipo: “Uno hay que subir y uno hay que bajar”, precisó.

La medida llega luego de un período de fuertes incrementos. En el último mes, la nafta súper registró una suba del 4,5% en la Ciudad de Buenos Aires, por encima de la inflación mensual, mientras que el aumento interanual alcanzó el 41,2%. La nafta premium, en tanto, subió 3,5% en el último mes y más del 31% en comparación con diciembre del año pasado. El gasoil también acumuló subas superiores a la inflación anual.

Desde YPF destacaron que la reducción anunciada busca comenzar a revertir esa tendencia, aunque remarcaron que los valores finales dependerán de cada región del país. En ciudades del interior, como Gualeguay y el sur entrerriano, el impacto se irá observando de manera progresiva en los próximos días.

En otro tramo de la entrevista, Marín se refirió al contexto económico y al sector energético, subrayando la importancia de la competitividad para sostener el desarrollo de Vaca Muerta y potenciar las exportaciones. También destacó la necesidad de modernizar la legislación laboral para acompañar el crecimiento de la industria.

Finalmente, el titular de YPF remarcó el rol estratégico del sector energético para el desarrollo nacional y expresó su respaldo al rumbo económico actual, señalando que un país abierto y con reglas claras resulta clave para atraer inversiones y generar crecimiento sostenido.