El abogado querellante Ricardo Monzón, representante legal del denunciante que inició la investigación, confirmó que la resolución deja firme la condena y que ya no admite instancias de apelación.

Delitos probados y material secuestrado

Acuña fue encontrado culpable por un conjunto de delitos de extrema gravedad:

• Grooming,
• Corrupción de menores,
• Abuso sexual con acceso carnal agravado,
• Suministro gratuito de estupefacientes,
• Privación ilegítima de la libertad,
• Producción y divulgación de pornografía infantil.

Durante los allanamientos se secuestraron  fotografías, computadoras, pendrives, tarjetas de memoria y otros dispositivos electrónicos. Junto con la sentencia, el juez ordenó el decomiso y destrucción de todo el material, además de los estupefacientes incautados.

El rol de la víctima denunciante y otros testimonios

Monzón precisó  representó al único denunciante formal, quien era menor de edad al momento de los hechos, algo que quedó plenamente demostrado en la causa. Sin embargo, aclaró que hubo más testimonios, aunque no todos se constituyeron como denunciantes por el impacto emocional y el temor a revivir situaciones traumáticas.

“Todos eran menores. Siempre eran menores”, remarcó el letrado, quien destacó el trabajo conjunto con la fiscal María Ángeles Shell. La investigación se completó en un tiempo  breve de 11 meses.

Modus operandi comprobado

Según la causa, Acuña actuaba siempre solo. Aprovechaba su rol social —era profesor, abogado y dirigente— para tomar contacto con adolescentes a través de redes sociales, detectar situaciones de vulnerabilidad y captarlos mediante dinero, drogas o prebendas. Los encuentros se concretaban siempre en su domicilio, donde se produjeron los hechos acreditados por la Justicia.

Situación actual del condenado

Tras la lectura de la sentencia, se comunicó al Servicio Penitenciario que Acuña pasa de prisión preventiva al cumplimiento efectivo de la condena, alojado en la Unidad Penal de Gualeguaychú, en el sector conocido como “La Granja”.