A partir de hoy cierra temporalmente
En seis meses robaron cinco veces en el Hogar de Día
Esta triste sucesión de hechos delictivos ha generado el cierre temporal de la institución de calles Rosario del Tala e Islas Malvinas. El último robo, que incluyó destrozos en el edificio, se produjo en la madrugada del pasado domingo.
Al respecto, EL DEBATE – PREGÓN mantuvo diálogo con la presidente del Hogar de Día, Zulma Iviglia y explicaba lo sucedido. “Esta es la quinta vez que ingresan al hogar con fines de robo, pero esta vez rompieron la puerta de la cocina, la hicieron añicos y ya no sirve más. También doblaron la abertura del pasillo, se metieron por ahí, quitaron una puerta de madera que conecta con el salón, en donde también estuvieron y ahí pudieron abrir la puerta del costado y poder sacar las cosas por ese lugar. Abrieron el freezer y se llevaron tres o cuatro pollos y algunos paquetes de fideos. En realidad, no había demasiado porque desde la anterior vez que habían robado trato de tener mercadería lo menos posible y traer lo que se pueda cocinar en el día o en el siguiente. De todas maneras, lo indignante es el daño que hicieron”.
“Así que salí por los medios porque no conseguíamos puerta, y gracias a Dios y a un bombero muy solidario que nos donó una abertura”, destacó Iviglia. “Ahora hay que colocarla y realizar el marco y todo lo demás. También necesitamos materiales para la construcción para enaltar el tapial, que es muy bajo y es por donde ingresan a delinquir. En este sentido, también conseguimos esos materiales; gracias a la colaboración de la municipalidad y el corralón ‘La Barraca’, a los cuales les agradecemos enormemente”.
“Estos delitos empezaron en el invierno pasado y de ahí en más nos han agarrado de punto para hacer ese tipo de cosas”, comentó. “Al respecto, he realizado solicitudes en la Justicia y todo sigue igual. Supongo que la gente que roba continúa libre porque siguen haciendo los mismos delitos”.
Ahora no nos queda otra que cerrar el hogar, no tenemos otra alternativa porque no hay forma de proteger nada de lo que hay en el hogar. Se cierra hasta cuando se pueda reparar los daños. No tengo idea del tiempo que pueda demandar esto porque depende de la gente que venga a arreglar las puertas y levantar el tapial. Encima tenemos la mala suerte de que en enero la gente se va de vacaciones y yo no le puedo pedir demasiado a quienes colaboran; igual espero que las obras se realicen en el menor tiempo posible. No se sabe cuándo comenzarán las obras de reparación y seguridad. Lamentablemente pagan justos por pecadores, ya no va a haber comida por unos cuantos días. Tenemos las manos totalmente atadas. Hoy es el último día (por ayer). A veces vienen quince, a veces veinte abuelos al hogar. En verano vienen menos porque sufren mucho al calor. Vienen y se llevan la vianda. Generalmente se hace una olla entera de comida y la misma se entrega todos los días, junto también a leche, frutas, pan”, explicó Iviglia.