Desde mi infancia que vivo rodeada de flores y plantas, mi abuela materna con quien tenía una relación muy estrecha era fanática de las plantas y las flores, ella decía que tenía muy buena mano para que le prendan las plantas de gajo o crecieran estupendas , incluso mi abuela les hablaba y mantenía con ellas largas conversaciones (en ese momento yo no sabía si lo hacía porque vivía sola o si pensaba realmente que las plantas la oían, de todas maneras de una u otra forma, las plantas y ella eran felices). Mi madre, de igual manera, ocupada con su trabajo pero con tiempo para dedicarle a sus plantas, siempre me enseñaba nombres, lugares donde les gustaba vivir a cada una, (a la sombra o a pleno sol) y en que estación esperaba que dieran sus flores. Yo prestaba atención pero hasta entonces era solo eso. Contemplación.

Lo mío fue una vocación tardía, pero no podía haber sido de otra manera. Durante mi época de estudiante en bs as, conocí a quien hoy es mi marido quien tenía su balcón repleto de plantas y árboles frutales, apasionado también por la naturaleza y la vida al aire libre hizo que yo siga adentrándome en el mundo de las flores y las plantas, (aunque en mi balcón había unas pocas macetas que regaba de vez en cuando).

Terminados nuestros estudios volvimos vivir a Gualeguay, a una chacra donde tuvimos que parquizar todo desde cero ¿cómo lo hicimos? a prueba y error… recorriendo viveros, comprando revistas y de esa manera logramos aprender infinidad de nombres nuevos de árboles y plantas convirtiéndonos casi en expertos de plantas y jardines.

 También tengo que destacar la ayuda y la gran influencia en este mundo verde de kiki (mi suegra) quien es “jardinera” entre otras tantas cosas y mi maestra en el arte de realizar arreglos florales. Su casa está repleta de impresionantes jarrones con flores que decoran cada rincón a la perfección y su jardín es una maravilla para sentarse a disfrutar.

Desde que aprendí entonces “el oficio”  soy la encargada de realizar los arreglos florales de todos los eventos familiares y fechas particulares.

En fin, no pude escapar y estoy muy agradecida a quienes me invitaron a ser parte de este mundo increíble y satisfactorio de las plantas.

Hoy desde “La Baulera” entre los muebles y la decoración, me perfeccioné en el diseño de interiores brindando asesoramiento a nuestros clientes sobre la distribución de sus muebles y combinación de estilos, colores y objetos decorativos, aceptando a las plantas y las flores artificiales con buenos ojos, porque entendí que no todas las personas disponen del tiempo ni del espacio para cuidarlas pero que son un elemento esencial en la decoración del hogar.

MI arte con los arreglos florales si bien comenzó en el ámbito familiar,  rápidamente se amplió. Comenzaron a pedirme colaboración para elaborar centros de mesa para distintos eventos sociales y más adelante continuó en nuestro local elaborando ramos con flores artificiales para decorar el salón. Los clientes se querían llevar el ramo completo, así como estaba armado…una y otra vez, luego directamente me pedían que les arme un ramo para un lugar en particular y así cada vez más frecuentemente. Un éxito! La práctica,  me daba cada vez más confianza y seguridad.

Este año, tuvimos la posibilidad de mudarnos de local y de contar con más espacio, lo que me llevó a pensar en la  idea de organizar algunos talleres, todos referentes a la decoración del hogar.

 Próximamente daré inicio a este nuevo ciclo, con el primer taller de “Arreglos con flores naturales”  para crear belleza y despertar emociones.

En el taller de flores,  voy a enseñar a realizar, paso a paso, centros de mesa básicos con flores naturales. Los conocimientos que aprenderán los podrán utilizar para la decoración de diferentes espacios. Van a elegir de una base/florero como soporte  para la realización de tu creación y diversidad de flores y verdes de temporada. Vamos a compartir técnicas sencillas