Valentina Etchebest volvió a emocionar en Gualeguay con su espectáculo “Tango y algo más”

Valentina Etchebest nació en Santa Rosa, La Pampa, y aunque estuvo radicada durante algunos años en Pigüé, provincia de Buenos Aires, actualmente volvió a instalarse en su ciudad natal. Tiene 20 años y lleva ya 12 años inmersa en el mundo del tango.

Ha recorrido escenarios de gran relevancia como el Estadio Luna Park, donde participó de la final del Festival y Mundial de Tango de Buenos Aires en 2018, así como también el Centro Cultural Kirchner (CCK), Señor Tango, Café La Humedad, Esquina Homero Manzi, Torquatto Tasso, La Botica del Ángel, Teatro Astros, Teatro Maipo, Academia Nacional del Tango, Casa del Tango, Teatro Coliseo Podestá de La Plata, Teatro Municipal de Bahía Blanca y el Teatro Español de Santa Rosa, entre otros.

Además, ha participado en diversos festivales internacionales de tango dentro del país y ha realizado cinco giras por el exterior, con presentaciones en Chile, España, Francia, Suiza y Polonia.

En esta reciente presentación en Gualeguay, Valentina, con una belleza que deslumbra y un talento que emociona, logró cautivar por completo a todos los presentes. Desde el instante en que pisó el escenario, se adueñó del corazón del público, que no quería dejarla ir. Las ovaciones sostenidas y los repetidos pedidos de "bises" fueron prueba contundente de que nadie deseaba que esa noche mágica llegara a su fin.

Previo al inicio del espectáculo, El Debate – Pregón dialogó con la nueva estrella del tango, quien nos comentó lo siguiente:

—Para quienes todavía no te conocen, contanos quién sos, cuántos años tenés y, bueno, sobre tu profesión también, claro...
—Soy Valentina Etchebest, canto tango desde los 8 años, tengo 20. Me encanta cantar tango, lo elijo por sus letras, por sus melodías, y tuve la suerte de poder recorrer el país con el tango y de poder también salir del país un par de veces para llevar el tango y disfrutarlo en las milongas y en distintos escenarios.

—Es decir que esto ya para vos es una profesión.
—Sí, sí, sí, totalmente, es una profesión.

—Contanos acerca de tu vínculo con Gualeguay…
—Yo amo Gualeguay, mi familia es oriunda de esta ciudad, mi papá nació acá y tenemos familia y amigos, así que yo disfruto mucho venir acá. Mi papá se llama Horacio.

—¿Y vos naciste en...?
—Yo nací en Santa Rosa, y ahora estoy viviendo ahí, en La Pampa. Hice un paso por Pigüé también, donde viví la mayor parte de mi vida hasta ahora. Hace poquitos años que volví a Santa Rosa. Siempre venimos a Gualeguay de vacaciones o, como esta vez, a cantar.

—Y al tango ¿cómo lo descubrís? Si bien lo elegiste porque te gustó, por su melodía, etcétera, pero ¿cómo llega a vos?
—¿Cómo lo descubrí, digamos? El tango lo descubrí en un viaje. Estábamos escuchando un CD de Cacho Castaña que eligió poner mi papá en el auto. Era un CD de grandes éxitos y ahí estaba el tango Garganta con arena. Y ese fue el primer tango que canté. Después, en mi casa seguí investigando sobre otros tangos: Malena, Nostalgias... Esos fueron los primeros. Y el tango es muy atrapante, muy apasionante. Sí, sí, sí. Para mí las letras, todas las historias que cuentan, son lo mejor. Y eso lo voy a mostrar hoy también, claro, en el espectáculo.

—¿Y quiénes son tus preferidos? No sé si es para cantar o como artista. ¿Quiénes te gustaron más o quiénes te gustan más?
—A mí, bueno, obviamente a Cacho Castaña le tengo un gran cariño por todo lo que significa y significó para mí. Gardel es el mayor referente para mí en el tango. Y después trato de escuchar a todos. Escucho a cantantes que son amigos, porque ya después de varios años de profesión he conocido a muchos que me ayudan y me dan consejos, así que yo los escucho a ellos. Y también escucho cantantes de otras épocas: Susi Leiva, Libertad Lamarque... Me gustan mucho ellas también.

—Contanos por último —y te agradezco el tiempo— ¿qué vas a presentar en Gualeguay? ¿Qué vas a interpretar?
—Hoy voy a estar presentando un show que se llama Valentina, Tango y más, un encuentro emocional. Voy a hacer, aparte de tango, otro tipo de canciones francesas, españolas, mexicanas... Y es un encuentro emocional porque cada una de estas canciones provoca vivencias en nosotros y eso se va a reflejar durante todo el espectáculo.

—Bien, Valentina, una más: ¿son propios o de otros autores?
—Son todos temas ya escritos, de antes. Me gustaría, la verdad, escribir... Tengo algunas ideas y, bueno, ya de a poquito voy a empezar a componer. Todo se puede dar. Todo se puede dar, sí. Bueno, te dejo el tiempo. Muchas gracias.