Ciencia
La educación, respuestas necesarias ante esta realidad
Como agradecidos a la Enseñanza Tradicional, es necesario, que nos traslademos a la Enseñanza para la comprensión; el objetivo es que los estudiantes puedan desenvolverse con mejor desempeño en su medio.
Es determinante el rol de las instituciones educativas no sólo en el aprendizaje, sino en el desarrollo de las llamadas “Habilidades del Siglo XXI”: El pensamiento crítico, el liderazgo, la comunicación, la capacidad para “aprender a aprender” y la inteligencia emocional; son habilidades meramente humanas, útiles para la vida, que suelen quedar a merced de la experiencia y curiosidad de cada uno. El hacer es una instancia definitiva para el aprendizaje. ¿Cómo se pueden brindar espacios en que los estudiantes sean protagonistas de sus propios aprendizajes? Vayan ideas que pueden resultar útiles:
- En principio, romper la distribución tradicional del aula, que el docente deje de ser el centro y pase a otro lugar dentro del proceso, el de facilitador, orientador, el de guía.
- Implementar el aprendizaje basado en proyectos, el aula invertida: presencial y virtual, el pensamiento de un diseño aplicado a la educación.
- Estimular el trabajo en equipo, proponer formatos de evaluación que permitan poner en práctica otras habilidades, variar actividades dentro del aula: Que alumnos busquen evidencias, establezcan analogías, encuentren formas creativas de explicar un tema.
- Devoluciones sobre desempeños, en términos de habilidades. ¡Cuánto me hubiese gustado que mis docentes me dieran consejos para mejorar mi comunicación oral y así evitara el pánico que sentía cada vez que tenía que hablar en público!
- En vez de que los estudiantes “completen” las evaluaciones, proponerles que sean ellos quienes las corrijan.
- Destinar espacios para conversar sobre emociones y saber percibirlas y regularlas; fomentar el uso de diarios de aprendizaje.
Para quienes trabajamos en el ámbito educativo, conocer y compartir estos aportes teóricos puede darnos indicios importantes, de la forma de desarrollar nuestra tarea y lograr que alcancen los objetivos. Experimentar, compartir buenas prácticas y el deseo genuino de formar estudiantes que no sólo “sepan” sino también “hagan cosas con lo que saben”; son indispensables para el giro de una educación enciclopédica hacia una educación basada en desempeños. El aprender a aprender es la capacidad para poder seguir aprendiendo toda la vida, como requiere esta época de caducidad, rápida, del conocimiento… En todas las profesiones y roles, es necesario un papel activo que consiste en salir a buscar el aprendizaje. Los cambios continuos, son determinantes de la necesidad de actualización permanente, con capacidad de apreciación crítica para elegir las fuentes. Para alcanzar todo esto es necesario que los docentes, creativamente, sean capaces de motivarnos en disfrutar el placer del aprendizaje durante toda la vida. Para ello es necesario desprenderse de la necesidad de aprendizajes pasivos, sólo para las evaluaciones.
Dr. Bernardo “Cacho” Gandini
“El educador mediocre habla. El buen educador explica.
El educador superior demuestra. El gran educador inspira”
William Arthur Ward