General Galarza
23 de julio: una fecha que vive en la memoria de La Academia de General Galarza

El 23 de julio no es un día cualquiera para el Club Deportivo La Academia de General Galarza. Es el “Día del Socio”, pero, sobre todo, es la conmemoración de una gesta histórica que evitó la desaparición de la institución y consolidó su lugar como símbolo deportivo y social de la ciudad.
En 2009, el club atravesaba una de las etapas más críticas de su historia: una situación económica insostenible lo llevó al borde del remate por un juicio iniciado por Toribio Castro. La amenaza era real: perder el espacio deportivo que representaba identidad y pertenencia para generaciones de galarceños.
Sin embargo, en un acto de compromiso colectivo, socios, vecinos, autoridades y toda la comunidad unieron fuerzas en una cruzada solidaria que cambió el destino del club. Gracias a eventos, aportes individuales y la colaboración de cada rincón del pueblo, se logró reunir el dinero necesario para cancelar la deuda judicial. Así, el 23 de julio de 2009, la institución fue salvada del remate y pudo continuar escribiendo su historia.
Este hito quedó grabado en dos placas conmemorativas: una que reconoce el “Día del Socio” en agradecimiento al esfuerzo solidario, y otra que destaca la ayuda del pueblo y las localidades vecinas en aquella lucha.
Hoy, La Academia no solo celebra a sus socios, sino que rinde homenaje al espíritu solidario y combativo de General Galarza. “El club no es solo una cancha: es la gente que lo defiende”, repiten quienes fueron parte de aquella hazaña.
Actualmente, La Academia se erige como el único club vigente en la ciudad, un pilar deportivo y social que sigue formando jóvenes y generando espacios de encuentro para la comunidad. El desafío continúa: sostener y fortalecer este legado con el apoyo de cada socio y vecino, porque la historia demuestra que cuando el pueblo se une, lo imposible se vuelve realidad.



