Bopp pegó con Tuti y la venezolana Rengifo sacó bandera blanca
Dado las reglas de los organismos internacionales (entre ellos la AMB) de no permitirse arrojar la toalla en señal de abandono, el rincón de la venezolana irrumpió en el ring para abrazar a su pupila y detener la pelea.
Con otra muy buena actuación, donde estuvo la técnica y la destreza de siempre a la que agregó más eficacia, la bonaerense Yésica "La Tuti" Bopp (48,800) retuvo el título mundial minimosca de la AMB, al vencer por KOT 7 a la venezolana Débora Rengifo (48,900), en el combate central de una velada que se llevó a cabo el viernes por la noche en el estadio José María Gatica de Villa Domínico, Buenos Aires.Dado las reglas de los organismos internacionales (entre ellos la AMB) de no permitirse arrojar la toalla en señal de abandono, el rincón de la venezolana irrumpió en el ring para abrazar a su pupila y detener la pelea (con subirse sin atravesar las cuerdas y hacer la seña alcanzaba), cosa que el árbitro Hernán Guajardo hizo de inmediato, ante la queja de Rengifo contra su propio técnico, pues no quería abandonar.Previo a eso, Bopp ya la había derribado en el 1° con sendos cross de ambas manos, como si fuera un 1-2 pero curvos, y de no sonar el gong a los escuetos 2 minutos que duran los rounds femeninos, hubiese habido otra caída y quizás hasta un KOT allí mismo.En el 4° volvió a derribarla con un recto zurdo, y en el 6° hubo dos caídas más, una sin cuenta que debió haberse computado porque hubo mano, y otra con golpe fantasma, que Guajardo convalidó erróneamente.La Tuti estuvo más agresiva, con ganas de noquear, aunque en la tarea también recibió contras de la visitante, que las metía duras y no se achicaba; pero la diferencia en el resto entre una y otra era abismal.Cómo no serlo si Rengifo no estaba siquiera rankeada entre las 15 que ordena el organismo para retar a la campeona, lo cual reglamentariamente es un absurdo innecesario con tantas postulantes opcionales (muchas del continente), pese a lo cual la pelea fue sancionada como oficial.Máxime cuando la propia Tuti reclama rivales importantes, la revancha contra la azteca Kika Chávez, reina mosca CMB (su única vencedora), y unificaciones que a este paso jamás llegarán.
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