El partido se juega, discuten condiciones
La presentación de Boca será de utilidad para que el Tribunal castigue a River por los sucesos de violencia pero no alcanzará para dárselo por perdido. El martes en Asunción, Angelici y Donofrio negociarán dónde y cómo se jugará
El pedido de Boca para que el Tribunal de Disciplina de la Conmebol resuelva según el reglamento si se debe jugar el partido que resta con River, no prosperó. No por falta de argumentos -la presentación tiene un detallado abanico de casos que se ajustan a este y que terminaron con un resultado de escritorio-, sino por una decisión política.El presidente de la entidad que rige al fútbol Sudamericano, Alejandro Domínguez, le anticipó a los clubes que el partido se jugará y el martes le pondrán fecha y horario.La intención de Domínguez es que el martes en Luque, los presidentes de Boca y River -Daniel Angelici y Rodolfo D'onofrio, respectivamente- acuerden un día para jugar el partido cuyo ganador deberá prepararse luego para el mundial de clubes.Claro que si a raíz de la presentación que lleva la firma del Tano, el Millonario es sancionado con la clausura de su estadio o la prohibición de concurrencia, además tendrán que elegir una locación posible.El propósito de Boca es evitar jugar el partido y que Conmebol le de por ganada la final, pero deberá conformarse con que el informe sirva solamente para fundamentar un castigo económico que recaerá sobre River. Será una multa de varios miles de dólares además de que perderá la localía en su estadio o cierre las puertas cuando le toque jugar por Copa.¿Por qué desestimará el pedido de puntos de Boca? Porque Domínguez no concibe que la final de la máxima competencia del torneo que organiza se resuelva de ese modo. Además, existe una enemistad profunda entre el titular de Conmebol y Angelici, quien dos años atrás comandó una rebelión de clubes grandes de la región para constituir un torneo que eclipse a la Libertadores.La propuesta de Conmebol será que el juego sea el 8 de diciembre a las 17 en el Monumental. Pero si su pedido no prospera, Angelici está dispuesto a pedir que sea a puertas cerradas, aduciendo "temor" a que se repitan los hechos del sábado.En tal caso, si su pedido es rechazado Boca puede recurrir al Tribunal de Apelaciones de Conmebol y si tampoco consigue su propósito la última instancia es el Tribunal de Arbitraje Deportivo, TAS.
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