Dr. Bernardo “Cacho” Gandini
“A la corta o a la larga no hay matrero que no caiga”
“Las dificultades en el nuevo aprendizaje universitario” 4ªParte- 9ª Entrega
Probablemente pensar en irse por una carrera universitaria, con la situación económica actual, resulte difícil. Al respecto, debemos aceptar y convencernos, que los únicos límites están en el cerebro humano; por lo tanto, nuestro pensamiento crítico deberá ser: SIEMPRE SE PUEDE, SÓLO HAY QUE ENCONTRAR, LA FORMA. En todos los casos y siempre, ha sido, es y será necesario desarrollar algunas habilidades como: Auto-administración, poseer auto-disciplina, tener Eficiencia y Adaptarse a la situación económica. En síntesis: ser felices con lo que hay. Seguramente, entre otras opciones, se pueden considerar:
-ESTUDIAR CARRERAS A DISTANCIA: Esto implica estudiar carreras universitarias en el país y en el mundo, sin moverse de la casa, lo que es probablemente con menor costo económico. De las habilidades básicas mencionadas se requieren, especialmente, la auto-disciplina y eficiencia; es un enemigo de esto la procastinación o “dejar para después”.
-ESTUDIAR CARRERAS PRESENCIALES EN OTRAS LOCALIDADES: Si la familia está en una situación económica, que puede adaptarse a la realidad, y está de acuerdo en mantener el estándar de vida habitual, no hay nada que tener en cuenta. Si la familia no puede realizar ningún aporte, quien desee irse a estudiar, podrá realizarlo, priorizando encontrar un trabajo y luego, cuando se pueda, empezar el estudio. Quizás el primer año o algunos meses haya que dedicarlos a evaluar los trabajos posibles; de la realidad universitaria, ir informándose a partir del diálogo con personas en situaciones similares. Si la familia puede hacer un aporte, evaluar hasta dónde alcanza y ajustarse a ese ritmo de vida, con la mayor creatividad posible. En esta situación de las habilidades básicas, la auto-administración es la fundamental, sin dejar de lado las demás.
En todos los casos se puede estudiar y trabajar; con la misma actitud respecto de los trabajos de quienes se van a países extranjeros y realizan tareas que acá no elegirían.
Respecto de la adaptación al cambio en estándar de vida, puedo dar fe que se puede; si a alguien le sirviera mi experiencia, la puedo compartir cuando deseen; la diferencia es que yo no pertenezco a las generaciones de Uds. que son Millenials y Centennials o “generaciones de cristal”. La vulnerabilidad se puede afrontar y con entrenamiento, convertirla en fortaleza.
QUERIDOS GUALEYOS: Ayudemos, creativamente, a quienes nos rodean y están en estas situaciones; a los jóvenes les puede venir bien algunas experiencias nuestras, de los más 70 u 80, pero sin discursos rígidos; vivir en pensiones con baño compartido, lavar a mano, no volver tan seguido, era posible. En los momentos de bajón anímico, leamos juntos o recitemos: “No te rindas… de Mario Benedetti”.
“Dicen que el hombre es un animal de costumbres,
más bien de costumbres el hombre es un animal”
Anónimo