Las machas se renuevan
El ‘balayage’, término que viene del francés y se traduce como ‘barrer’, se popularizó como la tendencia it en coloración hace dos años. Consiste en iluminar los cabellos, a mano alzada y sin la necesidad de cubrirlos con papel en el proceso, para un resultado sutil y muy natural. Ahora la técnica evoluciona y promete un tinte aún más personalizado con el denominado ‘layage’.
Como un lienzoEl layage se realiza 'pintando' el cabello, el que previamente se ha separado en diferentes secciones, sobre una superficie plana. Se ha denominado 'pintura fluida de pelo' y fue desarrollado hace algunas semanas por los Salones Charles Worthington, ubicados en Londres, los que prometen que con esta técnica se consigue mayor precisión y control sobre el degradado que se quiere alcanzar. "Tener el cabello extendido sobre una superficie plana nos permite mantener las secciones de pelo separadas y así ver exactamente dónde aplicaremos los colores", explicó Katie Allan, gerenta creativa y experta en coloración de Charles Worthington, al periódico Daily Mail a finales de enero. "Es una nueva técnica que nace como necesidad de encontrar un procedimiento para pintar los cabellos con mayor control. Visualmente no hay mucha diferencia entre el layage y el balayage, la novedad radica en la forma en la que se realiza y la mayor precisión que entrega si lo comparamos con un balayage o un freestyle", cuenta Víctor Oviedo, estilista en Peluquería y Barbería Condell.Cabellera resplandecienteEste tipo de coloraciones (balayage y layage) pueden hacerse en todo tipo de cabellos, debido a que el principio fundamental de esta clase de mechas es que se fundan con nuestra base natural. Por ello, su principal ventaja es que duran muchísimo tiempo, no crean "efecto raíz" y no te atan a ir seguido a la peluquería para un retoque. "El layage es una técnica fantástica. A los estilistas nos ayuda a conseguir trabajos mejor logrados y colores más fundidos. Puedes decolorar y al mismo tiempo aplicar otros tonos (máximo dos), razón por la que entrega una coloración tridimensional que es distinta a las anteriores", explica Víctor. "A diferencia de esas antiguas californianas muy marcadas, el layage ofrece un color natural y fluido, como si el cabello hubiese sido tocado por el sol", complementa el experto.
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