21 de noviembre: Día de la Enfermería
“Quizá los pacientes olviden tu nombre, pero nunca olvidarán cómo los trataste”
En la República Argentina, el 21 de noviembre celebramos el Día de la Enfermería, pues ese día del año 1935 se fundó la Federación de Asociaciones de Profesionales Católicas de Enfermería, que nombró como patrona a la Virgen de los Remedios, cuya festividad es en esa fecha. Segunda Sección conversó con Cecilia Izaguirre, enfermera profesional que desempeña su tarea en CEM internaciones. Y por medio de esta nota saludamos a todos los enfermeros de nuestra ciudad y zona de influencia.
¿Qué significa ser enfermero? Es un oficio difícil, es necesario estudiar años en las escuelas especializadas, en universidades, y sobre todo sentir amor por los semejantes, cubrir turnos muy pesados, soportar desvelos y ver el sufrimiento de sus pacientes, sus enfermos, sus heridos, o en las campañas de prevención aplicando vacunas a tantos niños que por lo general lloran y el cariño y abnegación está siempre presente en el servicio que prestan, lo cual es invaluable. En ellos la vocación, el sentimiento de protección, aunado al profesionalismo y la calidez humana, hace que nos preguntemos ¿qué sería de un hospital, un sanatorio, una sala, de ese enfermo especial que necesita de sus servicios permanentes, si no existieran los enfermeros? Una enfermera o enfermero es un profesional de la salud al servicio de la comunidad. Está capacitado para prestar servicios en la prevención de las enfermedades, promoción, protección, y recuperación de la salud, así como en la rehabilitación, ya sea individual, familiar y comunitaria. Es decir su capacitación es orientada en lo asistencial, administrativa, docente y de investigación. Si hacemos historia y nos remontamos a los orígenes de la enseñanza, eran de carácter benéfico y empírico, de las necesidades propias que requerían de su presencia, guerras, plagas, y catástrofes. Con el devenir del tiempo, esta disciplina profesional es impartida por universidades o institutos como la Cruz Roja para cumplir sus funciones en los diferentes centros y hospitales, tanto nacionales, provinciales, fuerzas armadas, clínicas, servicios públicos o privados.Cecilia Izaguirre: "Ante las diferentes situaciones,somos conscientes que debemos mantener el equilibrio"Cecilia Izaguirre es enfermera profesional egresada de la Cruz Roja, institución a la que vino en el año `99 a cursar desde Mansilla, su ciudad natal. Ella nos comenta su experiencia en la profesión de enfermera: "El mismo año que me radiqué en Gualeguay, comencé a trabajar como telefonista en CEM mientras seguía mi formación profesional. Hoy continúo en el mismo sanatorio en el sector internación. La labor que desempeño en CEM se divide en dos sectores, uno con todo tipo de pacientes internados, de todas las especialidades, entre ellos pacientes longevos, pediátricos, nacimientos, cesáreas y otras cirugías," nos dice Cecilia para luego continuar: "En nuestro trabajo pasamos por diferentes situaciones y sentimientos; somos conscientes de que debemos mantener nuestra postura, nuestro equilibrio como profesionales, si bien no siempre es fácil. Pasamos de la alegría y la emoción por la llegada de una nueva vida, a la tensión y al estrés que genera un paciente crítico, o de alguien que estando bien, ya casi de alta, sufre una descompensación, como así también la angustia y el dolor que genera el entorno de una persona que pasa sus últimas horas de vida. Tratamos de mantenernos equilibrados, en pie, dentro de nuestras posibilidades." Más adelante Cecilia se refiere al otro sector en que desempeña su trabajo: "La otra tarea que desempeño desde hace 12 años es en el servicio de oncología donde aplico los tratamientos. Comencé en este sector en el año 2005 junto al Dr. Andrés Guercovich, y en la actualidad acompaño al Dr. Franco Ramello con el que trabajamos mano a mano. En este caso mi relación con el paciente es más estrecha y afectiva, ya que muchos de los tratamientos son prolongados, a largo plazo y complejos, lo que hace imposible no encariñarse." "Los pacientes que cursan enfermedades oncológicas reaccionan de diferentes maneras. Varios luchan contra viento y marea; otros necesitan mucho apoyo, y es ahí donde mi contención profesional es fundamental", nos comenta con emoción para luego continuar: "Y no sólo es acompañarlos durante las aplicaciones, sino también ante los efectos secundarios que pueden presentarse. Mi apoyo es durante la internación y muchas veces también cuando se van de alta. Estoy siempre comunicada con ellos, tanto que lo primero que les doy a los mismos es mi número de teléfono por cualquier inconveniente o duda que se les presente." "No me quiero olvidar que parte de mi labor es compartida y debo dar gracias a Dios por ello, a mis compañeros con los que trabajamos codo a codo, cómoda y tranquila porque en ellos deposito una gran confianza, ya que son excelentes profesionales con alto grado de responsabilidad y calidad humana", comenta, para finalizar diciendo: "Deseo que el próximo martes 21 de noviembre, Día del Enfermero, los profesionales en enfermería de todas las instituciones de salud pasen una linda jornada y en especial a mis compañeros de trabajo Melisa Mendieta, Melisa Morales, Cristina González, Ignacio Báez, Carina Pesso, Karina Dehner, Florencia Larrosa, Graciela Mendoza, Luis Solari.
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