Silvana Caraballo, entrerriana y sureña (2ª entrega)

Mi raíz entrerriana y mi follaje sureño (entre el fa m y el mi m)Y mi follaje cambió las siestas entrerrianas por las tardes sureñas con la luna llena asomando desde el mar, el río manso por el inmenso golfo San Matías, la gente alegre y de piel abetunada por gente añeja y de arrugas profundas y ásperas, en las que se evidencia una herida abierta aun fresca, una mirada que baja desolada al recorrer las calles de las grandes ciudades y asumir con dolor que el nombre de esa calle es Roca, que increíble burla pa los originarios de estas tierras.Mi follaje dejó guardado en el corazón el ritmo de la chamarra (FAM) y por mis venas ahora sureñas comenzó a transitar el loncomeo (MI m), el ritmo de estos pagos que es muy lento y casi adormece, lento y manso como la gente de estos pagos. Mi vida siempre está entre el FAM y el MI m, mi raíz entrerriana no se confronta con mi presente sureño, se hacen uno y dan como resultado lo que soy; mi raíz de campos de trigo se hace una con la inmensidad achaparrada de la Patagonia; la brisa tibia entrerriana se hace una con los cañadones de Soumuncura donde los secretos tehuelches se me ofrecen como tímidamente; el murmullo del río Gualeguay se hace uno con el sonido rítmico de la rompiente de este océano azul profundo................Ojalá no existieran fronteras que limitaran y delimitaran, porque la esencia de la persona se construye tomando de cada lugar lo que es significativo; ojalá que las culturas se mantuvieran en los distintos lugares de este bello país; ¿no entendemos todavía que el río se hace mar, que el río une, que el mar hermana?La raíz está oculta en la planta, pero el follaje es lo que esa raíz vivió, por ello insisto en la importancia de una buena niñez, de un buen nivel inicial y primario en educación, de una amena catequesis al inicio de la fe, del contacto diario con los abuelos, (esos seres inigualables que nos lo permiten todo marcando siempre el por que no), y por supuesto de esas personas que han sido parte de lo que hoy nuestro follaje muestra.En mi raíz entrerriana un capítulo único para mi abuela Marita que aun creo que va a aparecer por la galería taconeando sus zapatos altos listo a tomar mate conmigo, a mi madre ejemplo de luchadora, a padre serio, poco demostrativo, pero un maestro para mí, y a mis amadas hermanas, que aún las extraño infinitamente, con las que compartí mi infancia y mi adolescencia, esas hoy ya mujeres entrerrianas invencibles, que lo pueden todo, esas mujeres de ojos resplandosos y corazón de camoatí, a ese mi hermano entrerriano y musiquero, poeta incansable y inexplicablemente sensible hasta el extremo.Aun extraño mi Entre Ríos natal, aún añoro mi Gualeguay siestero; no lo cambiaría por ninguna otra ciudad, (y eso que vivo en Puerto Madryn); aún extraño y disfruto las chamarras, los chamamés bien tocados y cantados, la cultura rica e interminable que emana de esa tierra de ceibales y gurisitos siesteros, y amo mi patagonia hostil y mística, y elijo vivir acá y proyectarme en estas tierras sureñas, pero siempre, siempre con mi raíz entrerriana y bien Gualeya................ Ya se amanece en el golfo Nuevo, la brisa aún es fresca en esta época, mientras preparo el mate amargo de fondo suena una chamarra bien entrerriana, voy a ver hoy si por ahí cuando se viene la siesta logro ver a la solapa..............que cuando las palomas cantan seguro anda por ahiiii...... Silvana de raíz entrerriana y follaje bien, pero bien Patagónico ------------------------------------------------------------------Anexo: Silvana es instructora nacional en buceo, deporte que disfruta plenamente.