Los conservatorios en 1917 (II)

Bajo la dirección de destacados profesoras y profesores de música pasaron generaciones de niñas y no tan pocos niños que concurrían a sus conservatorios ante el imperativo de sus padres. Ellos veían en el solfeo una singular contribución a la formación de sus hijos. Algunos llegaron a merecer reconocimientos en el orden nacional e internacional, al descubrir en la música su auténtica vocación. Otros prevalecieron en la docencia local y constituyeron verdaderos puntos de referencia cuando se hablaba de la actividad cultural del pueblo. Por fin, también estaban aquellos que sólo volvieron a acercarse a un piano cuando la insistencia de la familia o de los amigos lo incitaban a maltratar algún clásico o algún tanguito de moda. "EL DEBATE" del viernes 14 de diciembre de 1917 informaba que habían llegado desde Gualeguaychú el director del Conservatorio "Francisco D'Andrea" de la Capital Federal, Profesor Elmérico A. Fracassi y el Profesor Juan Buades, del mismo instituto; su objetivo era examinar a los alumnos del Conservatorio Rossini que dirigía la Srta. Amalia Giorno. Así, con brillantes calificaciones, rindieron sus exámenes en Solfeo. Preparatorio: Bentos, María Luisa. 1er Curso: Vaccaro, María Emma, Beracochea, María Inés, Beracochea, Carmen y Zavalla, Lorenza. 2do Curso: Beracochea Carmen, Covitti, Celestina. Diploma Elemental de Solfeo: Giorno, Menotti, Di Masi, Luis. Estudio Complementario de Historia Musical. Armonía Didáctica: Giorno, Menotti, Di Masi, Luis. Piano. Preparatorio: Bentos, María Luisa y Zavalla, Lorenza. 1er Año: Beracochea, Carmen y Covitti, Celestina. 4to Curso: Di Masi, Luis y Giorno, Menotti. El martes 18, la sala del Teatro Italia lució todas sus galas. El Conservatorio Sarasate, que dirigía el Profesor Fidel Díaz, daba su concierto. Sarasate había sido un compositor y violinista español, fallecido en 1908, célebre por su Jota aragonesa, Zapateado y los cuatro libros de danzas española que aún forman parte del repertorio de los más consumados y renombrados violinistas. El Profesor Díaz había denominado así al conservatorio que dirigía. La velada del Teatro Italia fue de excepción. Actuaron a cuatro manos: A. J. Vaccaro y el Profesor Díaz, J. Barrandeguy y J. Freyre, en violín. También en piano a cuatro manos: María C. Freyre y el Prof. Díaz. Sobresalieron B. Legna, María M. Merani, María F. Behigo, Rómulo P. Soncini, J. Soncini, J. Míguez Iñarra y como colofón las interpretaciones efectuada por la magnífica orquesta bajo la batuta de Díaz. Las presentaciones cosecharon todos los aplausos en esa calurosa noche de gala, en la que los abanicos proliferaban en las gráciles manos y los caballeros a duras penas toleraban la rigurosa etiqueta...